El coronel alemán Claus Von Stauffenberg, fue el cabecilla para acabar con el dictador en una trama cuidadosamente trazada que el azar desmanteló
Stauffenberg era un hombre conocido
por todos y con un fuerte compromiso al partido, incluso había perdido el ojo
derecho durante un ataque aliado en África, pero odiaba en secreto al Führer. Aprovechó el día que Hitler iba a
reunirse con el Estado Mayor en elbúnker subterráneo en Prusia apodado «Guarida del Lobo»para organizar su plan de acción: adentrarse en
el edificio y colocar un maletín con dos artefactos explosivos
bajo la mesa de Hitlerpara terminar con su vida. Así lo hizo, y salió
huyendo con intención de viajar a Berlín, pensando que habría terminado con el
dictador.
Pero sólo una de las bombas estalló y
aunque murieron cuatro de las veinticuatro
personas presentes, ninguna de ellas fue Hitler, quien sólo sufrió alguna herida leve. Von Stauffenberg y sus compañeros
fueron capturados y ejecutados esa misma noche y otros doscientos implicados
en la Operación fueron asesinados o internados en campos nazis en los días
posteriores al atentado.